El hechicero, agotado por el viaje, se dejó caer sobre las templadas aguas de las cuevas termales. Tras concentrarse, conectó su alma con la urdimbre y comenzó a tejer un nuevo hechizo para poder continuar su camino.
Requisitos: El lanzador debe tener una puntuación en Ocultismo igual o mayor al Círculo del Conjuro que se desee aprender.
Efecto: Permite aprender un Conjuro de forma espontánea tras completar un ritual de meditación. El lanzador ha de pagar tantos Puntos de Maná como el Círculo del Conjuro, y superar una Prueba de Habilidad de Presencia + Nivel de Poder a Dificultad igual a la del Conjuro.
Se aplican las reglas de Aprendizaje de los Conjuros con normalidad; el jugador y el Director de juego deben ponerse de acuerdo para ver si el hechicero recibe sus Conjuros al azar o puede escogerlos.